Los pasados días 15, 16 y 17 de noviembre en Cartagena tuvimos la oportunidad de volver a encontrarnos, compartir y seguir aprendiendo en nuestro XIX Congreso Nacional de Profesionales del Autismo. Es difícil condensar en pocas palabras todo lo que pasó en esos 3 intensos días, pero aquí os dejamos un pequeño resumen de las cuestiones más importantes del Congreso, así como la galería fotográfica que ilustra todo lo acontecido.
El congreso propiamente dicho se inició el jueves, aunque ya desde el martes, profesionales de diferentes puntos del país se habían trasladado ya a Cartagena para participar en el curso pre-congreso dedicado al programa PACT.
Este programa de intervención temprana se dirige a promover el desarrollo de habilidades comunicativas desde un enfoque de entornos naturales, e incluye a las familias en el proceso de intervención y aprendizaje. Quienes asistieron al curso destacaron como puntos fuertes el trabajo desde una perspectiva de aprendizaje por descubrimiento de las propias familias en su interacción con sus hijos e hijas con TEA. También destacaron el cambio que aporta el programa respecto a la necesidad de realizar parones en la intervención mediada por el profesional, para conseguir una verdadera generalización de los aprendizajes.
Ya el miércoles por la tarde tuvieron lugar los talleres del Congreso, en los que se abordaron diferentes cuestiones específicas relacionadas con la intervención ante conductas problemáticas; estrategias y metodologías para prestar los apoyos que precisan las personas con TEA en las diferentes etapas de su trayectoria académica; atención y desarrollo de la afectividad. Simultáneamente se realizó un seminario sobre manejo del estrés y la ansiedad.
El jueves por fin llegó la inauguración del Congreso. En esta inauguración, en la que acompañaron al presidente de AETAPI y del Comité Organizador del Congreso, autoridades locales y regionales que dieron la bienvenida a todas las personas asistentes, se puso de manifiesto la necesidad de continuar aprendiendo para prestar los apoyos necesarios a las personas con TEA y a sus familias, de manera que se promueva su participación social plena y su calidad de vida.
El ponente que abrió el Congreso fue Digby Tamtan, que hizo suyo el lema del Congreso “AutismoS, entendiendo la diversidad” hablando sobre la diversidad de formas en las que se manifiesta el TEA y que además son cambiantes a lo largo de la vida, lo que obliga a generar recursos de intervención y apoyos que también deben ser cambiantes en cada etapa vital, dando respuesta a esas necesidades.
Después de la ponencia inaugural tuvimos la oportunidad de encontrarnos y saludar a todos aquellos amigos y amigas que hace tiempo que no veíamos, pero que siempre sentimos cerca en el café de los abrazos. Tras este momento de encuentro, se presentó el Espacio AETAPI en el que se hizo repaso de lo conseguido y los nuevos retos de AETAPI para los próximos 2 años.
Catherine Aldred, posteriormente, abordó el tema de la atención temprana desde la metodología del programa PACT que sirvió de resumen para todas aquellas personas que no pudieron participar en el curso pre-congreso.
Después de comer tuvimos una de las ponencias más esperadas del Congreso. Aunque motivos de salud no le permitieron estar presencialmente, Ami Klin quiso estar en el congreso e impartió su ponencia de forma virtual. En ella analizó todos los avances que la evidencia científica está consiguiendo sobre caracterización de manifestaciones de TEA en edades tempranas, a partir del análisis de trayectorias de desarrollo diferentes, que permiten una detección cada vez más precoz y, por lo tanto, una intervención temprana que se está evidenciando tiene un impacto fundamental en el desarrollo evolutivo de todas las capacidades de las personas. Aunque, tuvimos que esperar hasta el sábado en la Conferencia de clausura, para que Ami Klin nos contase detenidamente esos avances científicos sobre el impacto de la intervención.
A continuación, tuvo lugar el espacio de presentación de comunicaciones relacionadas con el diagnóstico e investigación sobre TEA, familias y educación. En estos espacios tuvimos la oportunidad de conocer de primera mano, todos los avances y buenas prácticas que se desarrollan por profesionales del autismo de nuestro país día a día.
El primer día de Congreso terminó con uno de los momentos más emotivos del Congreso, en una Gala en la que el Comité Organizador quiso mostrar a los asistentes la cultura y la historia de la ciudad, mediante una recreación histórica de la época del imperio romano y todo el legado histórico que tiene Cartagena.
En este mismo acto, se entregaron los premios Ángel Rivière, con la emoción de quienes los recibieron y de todo el auditorio, tuvo lugar el espacio para dar la bienvenida a todos y brindar por seguir encontrándonos en un espacio privilegiado como fue la terraza de El Batel con mar de fondo y el buen clima de la ciudad.
El viernes la mañana empezó con gran intensidad, gracias a José Ramón Alonso que nos ilustró con los últimos avances científicos en el campo de la neuroanatomía del TEA, de una forma muy didáctica y accesible.
Posteriormente, se puso encima de la mesa el nivel de evidencia científica que actualmente existe sobre los diferentes tratamientos y programas de intervención dirigidos a personas con TEA. Bajo la coordinación de María Llorente que actuó como moderadora de la mesa, David Saldaña, Margarita Cañadas y Juan Martos, analizaron desde diferentes perspectivas, la eficacia de los tratamientos bajo el parámetro de evidencia científica.
Entre sus conclusiones, se planteó que sigue existiendo una necesidad de implementar programas de intervención que la experiencia diaria demuestra que son eficaces, pero de los que es necesario seguir aportando datos a nivel científico. También que los programas que tradicionalmente se han considerado como tratamientos con un nivel sólido de evidencia científica, están perdiendo ese nivel de eficacia frente a otros que se demuestran más inclusivos y la tendencia generalizada a plantear la intervención desde una perspectiva centrada en la familia y a lo largo del ciclo vital. Pusieron de relieve que la ingente cantidad de estudios desarrollados en los últimos años nos aportan mucha información sobre cómo funcionan los tratamientos en atención temprana, pero aún no existe un corpus científico sólido que nos oriente en las intervenciones con adolescentes y adultos.
En esta ocasión, se dio más espacio para la presentación de los Premios Ángel Rivière de forma que se pudieron conocer más detenidamente las Buenas Prácticas y las Investigaciones que recibieron el Galardón. Además, se publicó de forma simultánea el Libro de los Premios de esta edición.
La sesión de la tarde se dedicó nuevamente a la presentación de comunicaciones, ya que fueron muchas las propuestas valoradas positivamente por el Comité Científico. En esta ocasión, se dedicaron las mesas a Buenas Prácticas e investigaciones sobre resultados de la intervención, ética y perfiles profesionales, adultos, empleo y envejecimiento y salud y bienestar.
Posteriormente, se generaron como novedad espacios de encuentro entre profesionales en torno a las mesas de trabajo impulsadas por AETAPI, con el objetivo de generar sinergias y foros de unión que sirvan para seguir avanzando. Tuvo especial interés la mesa de mujeres con TEA, en la que hubo varias profesionales que se interesaron, compartieron experiencias en la intervención dirigida a mujeres con TEA y plantearon nuevos retos en este ámbito.
Después de la cena de gala del congreso en la que, desde una perspectiva más lúdica, tuvimos la oportunidad de seguir charlando y generando alianzas con otros profesionales, se inició la jornada final del Congreso.
En primer lugar, tuvimos la oportunidad de escuchar a Ángel Carracedo que de una forma sencilla nos explicó los avances en investigación genómica que nos aportan nueva información sobre el origen del TEA y sus repercusiones en el desarrollo.
A continuación, tuvo lugar una mesa compuesta por Juan Manuel Alonso Peñalver, Paloma López Ciller y Eduardo Replinger fuentes, en la que moderados por José Manuel Herrero contaron,en primera persona, sus experiencias, las barreras que se encuentran en el día a día y plantearon qué podemos hacer como profesionales para darles los apoyos que verdaderamente necesitan para ganar en Calidad de Vida.
Ami Klin cerró el Congreso, nuevamente de manera virtual, con una ponencia en la que nos planteó que la evidencia científica está demostrando la importancia de la intervención temprana especializada para desarrollar todo el potencial de las personas con TEA, lanzando a los profesionales la idea de que no tenemos ni un minuto que perder.
El Comité Organizador quiso agradecer a todos el apoyo recibido con este magnífico vídeo de despedida y, aunque cansados, volverían a empezar.
HASTA MADRID 2020!!!